Dentro de las ponencias de las III Jornadas de Trabajo, Recursos Humanos y Salud, el martes 9 de noviembre se desarrolló la segunda sesión, liderada por el prof. chileno Héctor Vargas, reconocido psicólogo e investigador de la universidad de Talca. Se expuso de manera clara y detallada, una importante investigación centrada en los problemas de sueño y los accidentes laborales. Una vez finalizada su intervención, se propició un interesante y nutritivo espacio de interacción y debate online sobre el tema tratado.

En la ponencia, se habló sobre los problemas de sueño y los accidentes laborales, así como sobre la relación existente entre ambos.

En primer lugar, y centrando la atención en los problemas de sueño, se destacó que para hablar de ellos se debe tener en cuenta dos factores importantes: la cantidad de sueño, mínimo 7 horas; y la calidad del mismo, referente a la capacidad de adquirir poder reparador, para lo que debe ser continuo y no interrumpido. Así pues, se planteó que las personas que vivían en ciudades con mayor población, así como las trabajadoras y trabajadores chilenos mostraban peores indices en cuanto a calidad y cantidad de sueño, especialmente las mujeres.

En segundo lugar, referente a los accidentes laborales, el profesor Héctor Vargas indicó que se trataba de aquellos que ocurren en el trabajo o en el trayecto de ida o vuelta del mismo (in itinere). Ante esto, la investigación evidenció que el 75% de los accidentes laborales se daban en el trabajo, afectando más a hombres, frente a un 25% que ocurre en el trayecto, donde se veían afectadas más mujeres.

En base a estos datos, surge una importante cuestión a resolver: ¿Estos problemas de sueño tienen alguna relación con la ocurrencia y prevalencia de accidentes laborales?

Ante lo planteado, surgieron diferentes aspectos influyentes, donde destacan las condiciones laborales de los trabajadores y trabajadoras, las condiciones de tránsito, así como la existencia de la inercia del sueño, conocida como el estado transicional de baja activación ocurrido después de este.

Por lo tanto se concluyó que pese a la influencia de diversos factores, los problemas de sueño, manifiestan una fuerte relación con los accidentes laborales, situación descuidada hasta el momento, y que precisa de programas preventivos que aborden dicha problemática. Por todo ello, la ponencia, junto con las actividades que se realizaron acerca del tema tratado, invitaron a un debate nutritivo, interesante y enriquecedor.

Autores: Alejandro Ruiz Cortés y Sara González Mira